miércoles, 18 de abril de 2012

YO JUAN, "COMANDANTE" DE LA BENEMERITA...

Hola amigos, al final de esta historia nos reiremos....pero a mí, cada vez que la recuerdo se me pone una mala leche....me indigno!!
Estábamos "de compras" mi santa esposa y un servidor, en uno de los grandes centros comerciales de Zaragoza, sentí necesidad de visitar los servícios, para hacer un "pis", en esto que cuando estaba saliendo de dichos servícios, un "joven" que salía delante de mí, casi tropieza con una señora.

La señora, una mujer de color, pequeñita y de "formas redondeadas" se encontraba desorientada, pues estaba mirando los carteles de las puertas de los servícios, intentando localizar el que le correspondía,(caballeros, señoras, minusválidos). En esto que el "joven" que he mencionado antes, el que casi tropieza con ella, le suelta : ¡¡PARA LAS GORILAS NO HAY SERVICIOS!!.

Yo que estaba detrás de él, de repente me siento paralizado y tan sumamente molesto que instantaneamente me invade una "mala leche" que me es imposible controlar.

A la señora se le queda una cara de pena-miedo-tristeza-horror.....y petrificada, no dice ni pío. El energúmeno-imbecil-prepotente-racista-inhumano....etc, etc, que ha insultado a la señora, continúa su camino como si nada. Al tercer o cuarto paso que da, yo, con tono y voz autoritaria, potente y "segura" le digo: Oiga joven, espere un momento (mientras echo mano del telefono móvil), espere que voy ha llamar al cuartel...espere un momento que esto no se queda así.

Mire, yo en estos momentos no estoy de servício pero soy COMANDANTE DE LA GUARDIA CIVIL,Voy a solicitar la presencia de una patrulla para que lo detengan....por xenofobia, racismo, maltrato, vejación....y ya veremos...

En esos momentos el "joven-cernícalo", se queda mirándome con cara de susto (pues yo, podía pasar perfectamente por un comandante o algo parecido: mi edad madura, imagen, compostura, cara de "militar", gestos...etc) y todo asustado me dice: hombre...no será para tanto...yo...no quería...en fin...que lo he dicho de broma...Y yo le contesto: ¡Cómo que no es para tanto! por mucho menos he encerrado yo a gente!!...mira chaval, sólo hay una forma de arreglarlo y antes de que me arrepienta, pídele perdón, disculpas y dile que lo sientes muchíííísimo a esta señora ¡¡AHORA MISMO!!.

El "jovel-cernícalo" ha "picado en el anzuelo"....y rápidamente todo asustado cumple al pie de mis "ordenes" con lo indicado por "el comandante"...rápidamente le ordeno que se aleje, que se marche antes de que me arrepienta, y él a paso veloz, sale del centro comercial a toda velocidad.

La señora "morena-pequeñita" se me queda mirando toda desconcertada y me dice : gracias señor comandante...muchas gracias!!, yo le contesto: de nada buena señora, pero a usted no le puedo mentír....yo no soy comandante...solo soy un simple y humilde minero de Teruel, que estaba por aquí comprando.

No os podéis imaginar la explosión de risas, carcajadas,gestos de sus brazos y manos....riendose de tal manera que la gente mas próxima al mirarnos, quedaron contagiados de tal manera que empezaron tambien a reir....sin saber de qué..¡¡pero se reian!!!

Y la mujer "morena" les decia riendo a carcajadas: un minero de Teruel, un minero!!....y yo negra como el carbón...JA,JA,JA,JA...benditos sean los mineros!!!


            DEDICADO A TODOS LOS MINEROS......UN ABRAZO, CASTAÑO.

2 comentarios:

  1. Y es que no hay nada como ponerse un tricornio (aunque sea imaginario) para poner orden y hacer que se respete a los demás. Muy bien por tu graciosa aventura y mejor aún por la profunda enseñanza que encierra. Como siempre... ¡Eres único, Juan!
    Un abrazo. JL Pueyo

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  2. Solo tengo una palabra que decir en cuanto tu actuación con el chaval... ¡¡¡BRAVO!!!

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